Este post fue escrito originalmente en Medium (link acá)

Hace más o menos un mes, estuve en una Hackathon que fue de mis mejores experiencias del 2020.

Un equipo increíble (Tanto profesionalmente, como personalmente) una idea ambiciosa en la que estábamos todos de acuerdo y que, sabíamos qué hacía falta y que la iban a usar.

Iniciamos, y durante el evento nos dimos cuenta que había proyectos que hacían casi un 25% de lo que queríamos hacer nosotros. Pensamos “Seguramente ganamos con nuestro proyecto” pero, nos quedamos en semifinales, ni siquiera llegamos a la final. ¿La razón? Pecamos de ambiciosos.

¿Por qué fallamos?

El proyecto llegó a semifinales faltándole bastante desarrollo todavía, mucho del feedback que nos dieron de por qué no funcionaba y por qué no pasamos, éramos plenamente conscientes de que faltaba. Y nos dijeron “Es mejor querer algo simple, concreto y hacerlo muy bien, que querer hacer un gigante y que al final tenga solamente un brazo”

Y, tiempo después de eso, me doy cuenta de que, además de que tenían razón, es un concepto que aplica más allá del desarrollo. Aplica en muchos otros, como en este blog que recién estoy empezando.

Muchas de las grandes ideas no iniciaron siendo supremamente complejas desde su nacimiento, fueron ideas simples, que cumplían únicamente con su propósito principal. Y que, a través de constante iteración fueron creciendo y mejorando. Para esto necesitamos saber ¿Qué es REALMENTE un Producto Mínimo Viable? (O MVP en inglés)

Qué es un MVP realmente

Definicion de un MVP, según Fred Voorhorst

Esta imagen, y la explicación que Fred Voorhorst acerca de qué es un MVP me parece la más acertada. Dice que el objetivo es desarrollar un prototipo que explore el principal valor de tu idea.

Eso quiere decir, que, si quieres hacer un auto, tu MVP debe ser un transporte parecido a un auto, no una moto o un fragmento del auto, y justamente eso último nos pasó en la Hackathon de la que te contaba.

Siguiendo el ejemplo anterior, queríamos hacer un auto como ningún otro, pero fuimos añadiendo parte por parte: Primero las ruedas, luego el armazón y así. Pero al momento que necesitábamos que funcionara, nos faltaba ponerle el motor, la batería, algunas cosas estaban, pero no estaban conectadas a nada, y sabíamos que esas cosas le faltaban.

Probablemente si nos hubiesen dejado seguir, al final hubiésemos tenido un prototipo de auto funcional, pero el punto es que no estaba funcionando cuando debía, y se nos fue la oportunidad por eso.

Y ese es el punto que quiero te lleves de este post. Muchas personas esperan a tener la versión lo suficientemente pulida de su idea para mostrarla al público. Pero el problema con esto, es que no sabes cuánto vas a tardar haciendo esto y la cantidad de oportunidades que dejas pasar. Oportunidades que si hubiesen visto así sea un prototipo simple de tu idea, te daban una chance de aprovecharla.

Arranca rápido, itera aún más rápido

Otra cosa que te da el iniciar con una idea simple e irla iterando y mejorando, es que obtienes feedback del entorno para saber en qué debes mejorar y qué tienes como fortaleza. Cosa que es difícil si trabajas tu idea sin que nadie la vea, ya que, no sabes si lo que estás puliendo es lo que necesita ser pulido.

La nota que estás leyendo, es un ejemplo de lo que te estoy hablando. Quería iniciar mi blog en mi página personal hace bastante tiempo, pero en el proceso me di cuenta que necesitaba aprender y hacer muchas cosas, para tener el blog como me gustaría tenerlo. Pero sabía que cada día que no generaba contenido eran oportunidades que estaba dejando pasar, así que decidí iniciar mi MVP, mi prototipo de auto, que cumpla su función, generar contenido y que la gente lo vea. (Puedes ver la historia completa en este post)

Así que, decidí iniciar en Medium, esperando compartir algo de mi conocimiento cada una o dos semanas. Mientras sigo trabajando en mi blog. Eventualmente, podré pasar el contenido a mi página personal, o ¿Quién sabe? que lo correcto desde un principio sea Medium.

La respuesta a eso, me la dirá el tiempo, y será gracias a que decidí iniciar de una vez, con lo que tenía, pero inicié.

~ Sergio